Aqui estamos Noa y yo en nuestra semana 33, cada vez más cerca de abrazarnos. En estos mágicos siete meses y medio nuestros cuerpos han ido evolucionando, lo que se puede decir es, "el milagro de la vida". Creo que no hay nada más fabuloso que la maravillosa transformación que experimentamos las mujeres para albergar una nueva vida. Digo esto además porque estoy teniendo la gran suerte de disfrutar del embarazo plenamente, para mí las pequeñas cosas menos positivas han ido pasando como las nubes de un temporal , rápidas y fugaces. Me quedo con la alegría al sentirla moverse dentro de mí, y ver como mi tripa se mueve como si de un terremoto se tratase. Levantarme llena de energía sabiendo que lo bueno para mi es bueno para ella. La ilusión de preparar su habitación, sus minicositas...... Su papi hablándole cada noche y ella respondiendo con sus puñitos y piececitos.
Nunca pensé que sería algo tan especial, es una pena que todo el mundo solo te cuente las cosas negativas, cuando es un tiempo hermoso donde aprendes que el cuerpo es inmensamente sabio y responde a cada necesidad que surja. Las mujeres estamos preparadas para dar vida, solamente tenemos que sentirnos seguras y olvidarnos de los miedos, escucha a tu cuerpo es el mejor y más sencillo consejo que podría dar. Y todo con la certeza y seguridad de saber que estas viviendo momentos únicos, que debes disfutar con la mejor de tus sonrisas, tal y como espero recibir a mi pequeña Noa. Un abrazo a tod@s!
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